En 2024, se concretaron 73 compraventas de empresas en la Argentina, un 13% menos que las 84 registradas en 2023, según el último informe semestral de First Capital Group.
Aunque hubo menos transacciones, el monto fue superior: las fusiones y adquisiciones de este año significaron un valor total de US$ 3.400 millones versus los US$ 2.000 millones correspondientes a las de 2023.
Para los especialistas, con el nuevo gobierno, 2024 fue un año de transición para las mergers & acquisitions (M&A), como ocurrió años pasados ante cambios de ciclo y expectativas. Momentos como el período 2013-2016 o el inicio de la pandemia tuvieron menor actividad, seguidos por etapas de recuperación gradual.
En estos contextos, no solo se redefinen estrategias de inversión y expansión. “También cambian modelos de negocio para lograr mayor eficiencia y adaptación a nuevas dinámicas, preparándose para un entorno más competitivo y sostenible”, explicó Miguel Arrigoni, CEO de First, que participó de la reestructuración de la deuda de Molino Cañuelas y trajo al país a Clairfield International, firma especializada en M&A con sede en Suiza.
Qué se espera para 2025
Si bien el nivel está por debajo del promedio histórico de 100 transacciones anuales, 2025 podría ser un año diferente, con un repunte que, incluso, podría superar este número. Se prevé mayor movimiento de la mano de compradores locales que buscan oportunidades para meterse en otros rubros y podría haber novedades con empresas concursadas o que entren en default.
El panorama muestra señales alentadoras de una incipiente reactivación, con impulso de sectores estratégicos como oil & gas, minería y tecnología en un escenario de mayor estabilidad y que ya genera renovado interés en inversores.
En ese sentido, hubo un cambio en la participación de compradores: históricamente, un 55% correspondía a extranjeros y un 45% a nacionales. Este año, los argentinos fueron mayoría, con un 52% de representación, mientras que los internacionales significaron el 48%, reflejando así una leve recuperación del protagonismo local y su confianza en el país.
Sobre el origen de los compradores externos, se destacó el liderazgo de norteamericanos, seguido por la creciente aparición regional y la presencia estable de europeos, principalmente de España y Reino Unido.
“La Argentina puede consolidarse como plaza de inversión dinámica y competitiva. Es clave capitalizar los recursos naturales, el talento humano y el marco regulatorio. Si esto se alinea con una recuperación económica similar a la que experimentaron países de la región, hay potencial de superar los niveles históricos y proyectar un mercado de M&A diversificado y en crecimiento”, consideró Arrigoni.
Fernando Garabato, socio de Deal Advisory e Industria Financiera de BDO Argentina, agregó que “hay compañías buscando integrar operaciones a su cadena de valor y compras para ganar mercado que complementan negocios existentes”. “Será un muy buen año. El crecimiento de la economía llevará a que algunas empresas deban expandirse inorgánicamente por medio de la compra de otras. Los players locales seguirán activos y las oportunidades de precio se terminan: en 2025, estarán dadas por las sinergias y el potencial de los activos a adquirir”, adelantó.
Aunque hay sectores subvaluados versus sus pares regionales, la caída del riesgo país en más de 1.200 puntos y de la brecha cambiaria al 10% mejoran la perspectiva de valuación de las compañías. “Motorizan el incipiente interés de fondos de inversión y private equity”, destacó Garabato.
No obstante, Fernando Zoppi, socio de Martínez de Hoz & Rueda (MHR) −estudio que participó de la venta de ExxonMobil Exploration (EMEA) a Pluspetrol−, opinó que tras los valores deprimidos especialmente hasta 2023, “aún hay precios interesantes”, y destacó a “energía y minería como los sectores estrella que seguirán fuertes”, potenciados por los proyectos en Vaca Muerta y el norte.
A su vez, anticipó la posible llegada de inversión privada externa: “Las perspectivas son muy buenas por las transacciones en proceso y la mejora de las variables macro y las políticas del Gobierno. Aún no hubo una entrada de players internacionales. La actividad estuvo dinamizada por los que están presentes. Probablemente, el levantamiento del cepo y la desregulación de la economía fomenten el ingreso de capitales del exterior”.
Algunas empresas que se vendieron en 2024
La Argentina retiene su posición como el quinto mercado más relevante de América Latina, con aproximadamente el 8% de las operaciones en la región, donde el volumen también bajó entre 10% y 15% anual. Brasil está al podio con cerca del 60%; seguido por México y Chile, con 13% cada uno; mientras que Colombia se mantuvo estable.
Aunque en el país predominan operaciones de pequeña y mediana escala, 2024 termina con acuerdos recientes de más envergadura, especialmente en segmentos que sortearon los vaivenes con resiliencia y exhiben el mayor potencial. Energía, banca y finanzas, tecnología, e industria y consumo masivo implicaron más del 75% de los deals:
- En el rubro energético, YPF continuó su estrategia de desprenderse de activos no estratégicos, Pluspetrol se quedó con la operación de ExxonMobil Argentina en Vaca Muerta y GeoPark compró cuatro bloques de hidrocarburos en Río Negro a Mercuria Energy Trading.
- En energías renovables, la inversión de Stellantis en 360 Energy consolidó su apuesta por fuentes limpias para sus operaciones en el país.
- En minería, aunque hubo una actividad más moderada, el país se posiciona como destino estratégico a largo plazo en litio, cobre, oro y plata. Resaltó el anuncio de inversión por US$ 500 millones de Rio Tinto para ampliar la capacidad de producción del proyecto Rincón que recientemente adquirió.
- En el sector financiero, se destacó la venta de HSBC a Galicia, convirtiéndolo en el segundo banco más grande del país.
- En industria & retail, Newsan compró el negocio local de Procter & Gamble, lo que marcó el ingreso del grupo nacional al rubro de consumo masivo y la salida del país del gigante global.
- Tecnología representó más del 20% de las transacciones. Aunque no corresponde estrictamente a M&A, sobresale el levantamiento de capital récord de US$ 300 millones por Ualá, la mayor inyección privada de este tipo en América Latina en los últimos tres años.
SN