Campeón de un recordado título con San Lorenzo, este exjugador se retiró y volvió a su pueblo para trabajar en una quiniela.
Javier Arbarello es un nombre que resuena y mucho en los pasillos de San Lorenzo. Campeón con el «Ciclón» del Torneo Clausura de 1995, el exjugador de fútbol decidió alejarse de las luces y las cámaras cuando colgó los botines: volvió a su pueblo natal, Ballesteros, con la misión de comenzar de cero.
Este caso no es la excepción en un deporte donde la presión y exigencias son altas. Lo cierto es que son muchos los exjugadores que buscan como vía de escape su ciudad natal para dar vuelta la página y desintoxicarse de un ambiente hostil y, por momento, complejo de manejar.
Javier Arbarello y su paso por el fútbol
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Arbarello debutó con la camiseta del «Pirata».
Nacido en Ballesteros, Córdoba, Arbarello comenzó su vida en fútbol profesional a los 23 años, luego de haber realizado trabajos rurales y en la construcción. Su primer club fue Belgrano, equipo que posó y fichó a la joven promesa.
Su rendimiento fue bueno llamó la atención de diversos equipos, aunque el cordobés se volvió por San Lorenzo, donde su carrera dio un giro positivo. Fue parte clave del equipo que en 1995 logró un título histórico tras más de dos décadas de sequía.
Aunque no fue una figura mediática, su constancia y rendimiento fueron vitales para ese logro. Luego de pasar por Platense y Juventud Unida, una lesión lo obligó a dejar el fútbol a los 33 años.
Su vida después del retiro
Después de retirarse, Arbarello regresó a Ballesteros para abrir una quiniela y un local de cobranza. También colabora en la Secretaría de Deportes local y lleva un estilo de vida tranquilo, alejado de las presiones que vivió durante su meteórica carrera.
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